Adiestrar a un caballo con fuerza y agresividad es una auténtica pelea entre caballo y adiestrador; el adiestrador obliga al caballo a hacer algo y por lo general el caballo se niega, por supuesto el adiestrador se cabrea y lo obliga más y el caballo se niega más.
Con el adiestramiento cerebral no se obliga, ¡se enseña! Y ¿cómo se enseña? Lo primero que tenemos que hacer, es saber que estamos enseñando a un caballo, es decir, a un animal que es, en la cadena de la vida animal, una presa no un depredador. Por lo tanto, no tenemos que hacer que él nos vea como un depredador, porque entonces no querrá estar a nuestro lado y estará siempre en constante nerviosismo.
Si empezamos por ver en el caballo a un ser que siente física, y psíquicamente, si pensamos que lo que queremos de él es que nos acepte encima y que cuando estemos con él no sólo vamos a pensar en pasarlo bien nosotros, sino que también vamos a pensar que él se siente cómodo, si empezamos pensando así, todo irá bien. Después podremos ir enseñándole a que haga lo que queramos pero sin obligarle, es decir sin forzarle y tratando que en todo momento haya buen rollo entre los dos, caballo y humano. A partir de ahí, podremos enseñar a nuestro caballo a que haga cualquier cosa, piafe, pasa etc…, movimientos que él ya sabe hacer y que los hace solo en libertad y cuando quiere. Nosotros lo que tenemos que hacer es enseñarle a que lo haga con nosotros encima y para eso sólo hay dos formas: por la fuerza y con diferentes utensilios, o sin fuerza y aprovechando los movimientos naturales del caballo.
Hay mucha gente que cuando la dices ésto, te dicen que no es posible domar un animal tan grande y fuerte si no es ejerciendo dominancia sobre él. Yo estoy convencido de que sí hay otras formas de hacer las cosas y no trato de convencer a nadie a que crea que el adiestramiento cerebral sea la forma de hacerlo, tan sólo os pido que lo hagáis contando siempre con el caballo, nunca obligándole ni maltratándole.
Podéis llamarlo como queráis, doma natural, doma clásica, doma vaquera, adiestramiento cerebral etc… como queráis, pero siempre hacedlo con respeto al caballo, ¡y no con respeto porque es muy fuerte y nos puede comer con patatas!, ¡no! con respeto, porque es un ser que siente el dolor igual que cualquier otro ser vivo.
En España y también en otros países no hay mucho respeto por el caballo y en general por los animales. Hay miles de casos de animales maltratados y cuando hablo de maltrato no sólo me refiero a maltrato físico, que lo hay y mucho, estoy hablando de maltrato psíquico que es peor y que es el que mucha gente no percibe, básicamente porque no saben nada del comportamiento natural del caballo.
Una gran parte de gente que tienen caballos en hípicas, no saben nada de caballos, lo único que saben es "montar", equiparse bien con espuelas, bocados etc…
Domar un caballo con el método que utiliza la domadora Lucy Rees y que ella llama doma natural (como podía haberle llamado de cualquier otra forma), es muy bueno no sólo para enseñar al caballo, también lo es para nuestras mentes que están llenas de estrés y de tensiones.
Este tipo de adiestramiento es como un juego entre caballo y hombre, un juego en el que nosotros enseñamos al caballo a hacer una serie de cosas coordinándonos con él, de tal forma, que al final aprende a hacer lo que le pedimos y nosotros aprendemos a tomarnos la vida con tranquilidad y sosiego...